Si bien lo conocen como el "científico del gol", apodo con el que llegó a México, el pasado sábado Quintero guió al Santos Laguna a una victoria de 3-1 sobre Tigres con argumentos más simples que los que usaría un estudioso de la ciencia: la picardía, la velocidad y una gran capacidad para definir con la cual convirtió dos goles.
Ante Tigres, uno de los cuadros más competitivos del circuito en los últimos años, Darwin celebró el inicio del mes de su cumpleaños (nació el 19 de septiembre) con par de dianas que, además de mantener a su equipo en zona de clasificación, le sirvió para saltar al primer lugar de los goleadores empatado con el chileno Esteban Paredes, del Atlante, y el argentino Lucas Lobo, de Tigres.
En el minuto 13, el jugador originario de Tumaco le pegó a un balón de pierna derecha y con gran colocación para dar al Santos una ventaja de 1-0, aumentada tres minutos después con un gol del campeón olímpico mexicano Oribe Peralta y cerrada con otra joya del colombiano, quien le pegó a le pelota cruzado por encima del arquero para finiquitar el triunfo de su equipo.
Formado en el club Deportes Tolima con el que debutó como profesional a los 18 años, Quintero mostró su clase desde temprano con una endemoniada velocidad, un gran olfato de gol y una picardía que le sirvieron para paliar su baja estatura, 1.66 metros.
Después e una temporada en la liga rusa con el Krylia Sovetov, Carlos Darwin regresó a Colombia para vestir la camiseta del Pereira, donde lo descubrieron los buscadores de talento del Santos mexicano, que lo ficharon para el torneo Clausura 2009.
Desde que llegó, Darwin hizo gran empatía con la hinchada, se ganó a los medios y se ganó el puesto de titular; en su primer torneo hizo cuatro goles y puso cuatro asistencias y a partir de ahí ha sido un referente de una de las delanteras más potentes del fútbol mexicano.
Con sus dos goles, Quintero se resarció de una pobre actuación la pasada semana, cuando falló varias oportunidades, y encabezó a los colombianos que sumaron otras dos dianas en la jornada, de Eisner Loboa, en la victoria del León, 0-2 ante el San Luis, y de Duvier Riascos, en el 2-0 de los Xolos de Tijuana sobre los Jaguares de Chiapas.
Los otros goles de sudamericanos en la séptima fecha del campeonato fueron, cuatro de argentinos, uno de ecuatoriano, uno de chileno y uno de uruguayo.
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