Noche sin lluvia, pese al aviso de negras nubes, y un clima templadito, no fueron bien aprovechados en la cancha del estadio Universitario. Ni Pumas ni Celaya apostaron por el triunfo con reales armas, por lo que el primer tiempo se fue en blanco, ante una entrada muy digna, no obstante apenas comenzar la semana.
Los cajeteros fueron quienes tomaron la iniciativa al primer minuto, pero su buena intención no generó nada en el arco de Odín Patiño. Luego, Pumas empezó a hacerse del balón, aunque a medida que avanzaban los minutos quedaba claro que en el grupo de jóvenes faltaba talento; no bastaba con Fernando Morales por la izquierda, mientras que Emilio Orrantia en lugar de tratar de ser aprovechado por la banda izquierda hacía funciones de contención al lado del capitán Fernando Espinoza.
Si Pumas era un equipo chato, sin profundidad, el Celaya no se quedaba atrás. Había muchas ganas en ambos equipos, eso sí, y también pelotazos; nada, pues, que pudiera inquietar a uno y otro.
Al minuto 25, más o menos, ambos entrenadores ya sabían lo que esperaban del rival en turno; pero ni Joaquín del Olmo ni su colega, el ex portero José de Jesús Fuentes, quisieron modificar su formación para darle un mejor rumbo al partido. Y así se fue la primera parte, sin peligro en las porterías, aunque con un par de intentonas de Morales y de Eduardo Herrera, como si las oportunidades hubieran estado a la orden del día.
Y mala suerte, porque esa lluvia que no apareció en los primeros 45 minutos comenzó a caer en el inicio de la segunda parte. ¿Bueno o mal augurio?
Lo cierto es que Del Olmo se atrevió, por fin, a meter a su gente de experiencia al juego; primero ingresó Martín Bravo y enseguida Emanuel Villa, ambos argentinos que fueron recibidos con aplausos por la afición universitaria. El Celaya también hizo cambios, delantero por delantero.
El encuentro mejoró en intensidad, pero no en llegada. Villamandó un cabezazo lejano y si acaso el celayense René García tuvo más a modo el balón para anotar casi enseguida. El ingreso del español Luis García por Pumas no pesó, pues ya era tarde, y el gol que hizo el uruguayo Waldemar Acosta faltando 5 minutos para el final fue anulado por fuera de lugar. En tiempo complementario Alfonso Nieto tuvo un arribo, pero tampoco de peligro. Pero otro 0-0 se escribió, al igual que en el juego de ida. Nada para nadie, lamentablemente para los casi 10 mil aficionados que se dieron cita en Ciudad Universitaria.
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