El encuentro entre Celaya y Pumas se retrasó alrededor de dos horas debido a que la cancha del Estadio Miguel Alemán se encontraba inundada a causa del aguacero que cayó en la localidad cajetera, y a pesar de que el campo no mejoró y que de inicio se había dado como oficial la postergación del cotejo, al final los equipos decidieron jugar ante la anuencia del cuerpo arbitral.
En Irapuato, el duelo que disputaron los Freseros y el Puebla se interrumpió en un par de ocasiones por una fuerte granizada que dañó de manera considerable la cancha del Estadio Sergio León Chávez, y a pesar de las condiciones del terreno de juego, las escuadras cumplieron con el tiempo reglamentario.
Por su parte, el encuentro entre Altamira y Atlas fue suspendido al minuto 65 por falta de luz, y aunque los equipos estaban por marcharse del inmueble, la terna arbitral y el comisario del partido les pidieron a los equipos que regresaran a la ancha para continuar el encuentro y éste terminó ya pasada la media noche.
Finalmente, en Veracruz también hubo una falla eléctrica y por varios minutos se suspendió el partido Tiburones-América debido a la falta de luz; y en otro momento se encendieron los aspersores de agua de riego de la cancha, lo cual también propició otra suspensión. De todas maneras se completó el duelo.
Y así, la Copa MX vivió un día caótico.
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