La máxima aproximación de la Máquina fue un disparo del argentino Christian Chaco Giménez al 60, que se estrelló en el poste, esto representó el tercer juego seguido sin victoria para el equipo dirigido por Enrique Meza para complicar su panorama rumbo a la liguilla.
Los cementeros llegaron a 23 puntos para colocarse momentáneamente en el cuarto sitio de la tabal general, pero tiene que esperar que se complete el resto de la antepenúltima fecha, mientras que los Diablos Rojos sumaron 20 para mantenerse en pie de lucha por un boleto a la fase final.
Cruz Azul buscó con mayor insistencia el triunfo en un partido entre dos equipos que fueron precavidos ante el temor de perder puntos por lo cerrado del torneo y la cercanía con el final del mismo.
Diablos Rojos vino decidido a llevarse por lo menos el empate y en alguna jugada a velocidad trató de atacar a la zaga celeste, que estuvo atenta en su escalonamiento.
Enrique Meza buscó abrir a la cerrada defensa escarlata con César Villaluz por derecha y Manuel Alejandro Vela por izquierda, pero el canterano tuvo un partido para el olvido, salió y se fue abucheado, mientras al zurdo le faltó profundidad aunque fue su costado el que más utilizó el cuadro de casa para atacar.
A los 19 minutos hubo una acción muy cerrada en el área cementera con una barrida de Jair Pereira al paraguayo Aureliano Torres y pudo ser marcada como pena máxima, pero el silbante determinó seguir con el juego.
En el complemento Cruz Azul buscó con el chileno Hugo Patricio Droguett por izquierda y con el atacante colombiano Edixon Perea, pero exageró en los servicios al área que fueron "pan comido" para la tercia de centrales de Francisco Gamboa, Edgar Dueñas y el argentino Diego Novaretti.
La máxima aproximación de los de casa se dio al minuto 60, cuando en un tiro libre cerca de la punta del área por el lado izquierdo, el argentino Giménez disparó a puerta y el balón pegó en el travesaño y en el rebote hacia el área no hubo quien lo empujara.
El insípido cero a cero no se pudo mover ante la decepción de los escasos seguidores celestes que se dieron cita al estadio Azul, mientras que para Toluca fue un punto valioso en calidad de visitante.
El arbitraje corrió a cargo de Fabricio Morales, cuya labor fue regular ante la jugada del penal. Amonestó por la Máquina a los argentinos Emanuel Villa y Christian Giménez, así como a los visitantes Antonio Naelson, Néstor Calderón, Diego Novaretti y Francisco Gamboa.
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