Los goles de la victoria fueron obra de Antonio Gallardo, al minuto seis, Marco Fabián de la Mora (18) así como de Erik Torres (19). El ecuatoriano Christian Benítez había logrado el empate momentáneo al 13.
Con este resultado, Chivas llegó a 25 unidades para asumir el primer sitio de la tabla general, mientras América se quedó con 14 en el lejano lugar 16.
Durante la semana, Navarrete abrió su corazón y confesó que había esperado mucho tiempo para poder disputar un clásico sin la sombra de Guillermo Ochoa.
El problema es que cuando este momento llegó, no pudo quitársela y cometió errores que definieron por completo el rumbo de las acciones, para convertirse en el "villano" de su película y de la de todos los americanistas.
Este sí fue clásico, sobre todo en los primeros 20 minutos, en los que los gritos de alegría y decepción se apoderaron de un Coloso de Santa Ursula que vio cómo, apenas al minuto seis, el cero se rompía y, de la mano, también el partido.
Muchos aficionados todavía no se terminaban de acomodar en sus asientos, cuando una excelente combinación le permitió a Marco Fabián de la Mora mandar por izquierda un centro al área, donde Antonio Gallardo se levantó para conectar un cabezazo pegado al poste derecho y poner el 1-0, al minuto seis.
Con un volumen de juego mucho menor que su rival, los de casa lograron acortar distancias, sólo siete minutos después, en el cobro de una falta en tres cuartos de cancha al área, donde el ecuatoriano Benítez se levantó para cabecear y poner el esférico pegado al poste derecho, inalcanzable para Luis Michel.
Hasta ahí parecía que todo sería muy parejo, algo con lo que Navarrete no estuvo de acuerdo, pues un error infantil le abrió las puertas a Chivas para recuperar la ventaja, al soltar un balón que tenía controlado, pero que dejó a la deriva para que Marco Fabián sólo lo empujara al fondo de las redes, al minuto 18.
Y un minuto después, marcó su historia como americanista al quedarse a medio camino en un centro por derecha que Erick Torres se encargó de conectar con un sólido frentazo, para poner el 3-1.
Con más ganas que futbol, los de Coapa buscaron equilibrar las acciones y generaron peligro en jugadas a balón parado, pero a diferencia de ellos, Chivas esta tarde sí tuvo portero en la persona de Luis Michel, quien antes del descanso salvó al menos tres claras de gol.
Una de ellas a tiro libre del argentino Daniel Montenegro, que amenazaba con colarse en el ángulo superior izquierdo, y sin duda la más importante en un tiro de esquina que Benítez conectó y Michel, con reflejo asombroso, a una mano envió a un lado.
El técnico americanista Alfredo Tena necesitaba hacer algo para la parte complementaria y ordenó los ingresos de Angel Reina, así como del argentino naturalizado mexicano Vicente Matías Vuoso, a cambio de José Martínez y de Benítez, al parecer por lesión.
El de por sí ya complicado panorama para los azulcremas se agravó todavía más al quedarse con un hombre menos, debido a la expulsión del mediocampista brasileño Rosinei Adolfo, al minuto 59.
Si Chivas tenía bajo control cualquier intento de reacción, el verse con un hombre más le quitó cualquier tipo de preocupación que pudiera tener, porque sencillamente su rival no tuvo argumentos para intentar, al menos, acortar distancias.
De hecho los visitantes tuvieron para aumentar la ventaja, pero ya no quisieron humillar más a su rival, al cual, además, prácticamente dejaron fuera de toda posibilidad de liguilla.
De esta forma, América suma un fracaso más en la era de Michel Bauer y que por supuesto también le toca a Luis Roberto Alves Zague, lo que debería ser un presagio de cambios en todos los niveles en una institución que ha perdido su esencia.
El arbitraje estuvo a cargo de Fernando Guerrero, quien tuvo una labor aceptable. Expulsó de roja directa al brasileño Rosinei Adolfo (59). Amonestó a Jesús Molina (64) por los de casa.
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