--¿Fue o no fue (penal)?, se le preguntó: "No sé, la tengo que ver en la tele, ustedes están para decirlo, ¿fue claro?".
Lo que sí dijo fue que "después de lo sucedido en Guadalajara los árbitros me han etiquetado como un simulador, no me están cobrando faltas que yo creo que son, nada más".
Como se recordará, ante las Chivas el mediocampista argentino salió expulsado porque el "nazareno" consideró que había fingido una falta en el área, aunque Cruz Azul metió una protesta ante la Comisión Disciplinaria y finalmente le quitaron la sanción de un partido de suspensión.
Aunque su actitud y su rostro decían otra cosa, aseguró no estar molesto y dijo que "no tengo ganas ni de protestar, me dan ganad de reírme sinceramente, porque hoy cuando escuché el pitido pensé que estaba cobrando penal y cuando me di vuelta ya tenía la amarilla en la mano. La verdad que no entiendo por qué me persiguen así, la verdad es que no me lo merezco".
Reconoció que con su gran esfuerzo en la cancha, está buscando afanosamente un gol como cruzazulino, aunque recordó que "ya lo dije a antes, no soy un goleador; es obvio que me gustaría marcar para agarrar más confianza, pero molesto sí (está), porque perdimos dos partidos seguidos, porque no nos salen las cosas. Creo que tenemos que quedarnos con el segundo tiempo, donde se notó que mejoramos, y llegar con la frente en alto al partido ante el América".
Finalmente, recoció que "me ha costado la adaptación, pero trabajo día a día para agarrar ese ritmo que me falta", además de reconocer que le gustaría iniciar los partidos, pues ya lleva dos arrancando en la banca, aunque señaló que si le toca entrar de cambio o de inicio, "seguiré dando lo mejor para demostrarle al técnico que puedo jugar".
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