Los hinchas lanzaron un grito antigay durante el primer partido de México el domingo 18 contra Portugal en Kazán, a pesar de una advertencia previa de la FIFA de que sería más estricta para detener los coros ofensivos durante el torneo que sirve como preámbulo al Mundial de 2018.
La FIFA indicó que el director de su comité disciplinario, Anin Yeboah, "decidió emitir una advertencia contra la Federación Mexicana de Fútbol por la conducta inapropiada de un pequeño grupo de fanáticos mexicanos que realizaron gritos insultantes y discriminatorios".
Los hinchas gritaron el grito a todo pulmón cuando el portero de Portugal lanzó su primer saque de meta del partido, como suelen hacerlo en todos los partidos de la selección mexicana, aunque luego bajaron el volumen y al final casi no lo gritaron.
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